L.- EL MONTE ARARAT EN 2010 (TURQUIA)

EN LA CIMA DEL ARARAT

En busca del Arca Perdida… ¡¡no que es broma!! Pero sí que es cierto que este año hemos elegido como principal actividad de montaña la ascensión al monte Ararat de 5.165 metros de altitud. ¿Qué porque este año? Porque se ha firmado un pacto de no agresión entre el gobierno turco y el PKK y tenemos que aprovechar esta ventana de paz.

El monte Ararat, en turco Agri-Dagi, es una montaña sagrada para las religiones judía, cristiana y mahometana… “y reposo el arca en el mes séptimo, a los diecisiete días del mes, sobre los montes de Ararat” (Génesis 8.4). Fue ascendido por primera vez en el 17 de Septiembre de 1829 por Johann Friedrich  Parrot, rector de la universidad de Tartu (Estonia), acompañado por cuatro de sus estudiantes. Es el pico más alto de Turquía. Tiene una circunferencia  de 30 kilómetros y está considerada como una de las montañas más singulares del planeta por su amplia base y por estar prácticamente aislada en una gran planicie, tan solo la acompaña la montaña  conocida como Pequeño Ararat. Satisfecha la curiosidad vamos al tema.
EL MONTE ARARAT Y  SU DERECHA EL PEQUEÑO ARARAT

El día 25 de Julio en el aeropuerto “Adolfo Suarez” (Madrid-Barajas) tomamos el vuelo de Iberia de las 18,00 horas con destino a Estambul donde llegamos a la 22,55 horas. Tenemos un pequeño autobús que nos lleva hasta el Hotel “Lady Diana”, cerca del centro histórico. En el tenemos contratados el alojamiento  y  desayuno.

Día 26 de Julio, nos levantamos tempranito, desayunamos y de tirón de nuevo al aeropuerto de Atatürk de Estambul, volamos en línea interior de Turkis Airlines a Van. A las 09,10 sobrevolamos el gran lago Van y cinco minutos después estamos aterrizando en el aeropuerto. Nos está esperando nuestro guía turco. Embarcamos todo el equipaje en furgoneta y partimos  dirección  Dogubeyacit. Por el camino hacemos una parada en las cataratas de Muradiye y tomamos algo en el “restaurante” que hay tras pasar el puente colgante. Según el guía ver las cataratas era inevitable.
LAS CASCADAS DE MURADIYE

Tenemos que hacer el registro de nuestra expedición en Dogubeyacit, el conductor aparca y nuestro guía va a un establecimiento estatal, no sé si del ejército o de la policía, para que tomen nota de nuestra expedición. Vemos sacos terreros y vehículos blindados por los alrededores. Solucionado el trámite vamos a comer a un restaurante con vistas al Ararat. Buena la comida. Después de comer retornamos al vehículo y ponemos rumbo a nuestro hotel, el Simer en las afueras de la ciudad. Vistas al Ararat, su silueta impone, como he dicho anteriormente no tiene ninguna montaña en los alrededores. Montaña aislada “rasca” asegurada. Tenemos habitaciones y media pensión contratadas. Lo justo para estar bien.

LLEGADA DE LAS FURGONETAS A LA ZONA DONDE ESPERABAN LAS ACÉMILAS

Día 27 de Julio, por la mañana sobre las 11,00 cargamos los bártulos en la furgoneta  y dejamos el Hotel Simer camino al punto inicial de la ascensión, abandonamos la carretera y entramos en pista de tierra. En aproximadamente una hora llegamos a nuestro destino. Nos están esperando los arrieros con sus caballos, mulas y burros. Son los varones de una  familia casi completa. Cargan nuestro equipo y el material de los campamentos y partimos en dirección al Ararat por un camino polvoriento y con vegetación baja, apenas unos cardos. 


DE CAMINO AL CAMPO I
DE CAMINO AL CAMPO I
DE CAMINO AL CAMPO I

Junto con nosotros van caminando un par de grupos de alemanes. Llegamos a la zona donde vamos a montar el C1 a 3.200 metros de altitud. Nos reparten las tiendas, una para cada dos, y una vez montadas pasamos a la tienda comedor donde nos tienen preparados un té. Poco más se puede contar de este primer día salvo que hemos llevado un paso muy tranquilo y que todos nos encontramos bien. A cenar y tras un poco de charla a dormir.
CAMPAMENTO I A LOS PIES DEL ARARAT

TOMANDO EL TÉ DE BIENVENIDA AL CAMPO I

Día 28 de Julio, desayunamos, recogemos el campamento y sobre las 09,30 comenzamos a caminar. Hoy el sendero va ganando bastante más altura que ayer, la pendiente es más pronunciada y el sendero discurre entre piedras y zonas de arena fina. Mucho polvo. Superamos los 1.000 metros de desnivel que hay entre el C1 y el C2, a 4.200 metros, sin mucho esfuerzo.


 SUBIENDO EL CAMPO II
EL HIJO DEL JEFE DE LOS ACEMILEROS CON SU CABALLO DE CARGA

La zona de este campamento es menos extensa que la del C1 y además hay acampadas otras expediciones que han cogido los mejores “nidos”. 

CAMPAMENTO II
Montamos nuestro campamento distribuyendo las tiendas en pequeñas terrazas dejando el espacio más amplio para la tienda comedor. Después de comer y descansar subimos algo más de altura, para aclimatar algo, y nos sentamos entre las piedras a contemplar el paisaje.

CON NATI Y ANA EN NUESTRO PASEITO DE DESPUES DE COMER

Tan solo quedan unas horas para que salgamos para la cima. Bajamos al campamento a preparar los equipos para esta noche. Cenamos y descansamos un poco. A las 23,00 horas estamos preparados para salir y media hora más tarde comenzamos a caminar. No hay visibilidad y el sendero va sorteando grandes bloques de piedra y ganando altura de forma considerable es muy pendiente y resbaladizo.
SALIENDO A POR LA CIMA

Día 29 de Julio, la pendiente es muy mantenida. Subimos muy despacito, Ana ha cogido algo de ventaja respecto a nuestro grupo. Esta amaneciendo y vemos la sombra del Ararat, a nuestros pies, en la inmensa llanura de Anatolia. Ya alcanzamos los primeros neveros estamos sobre los 4.800 metros.
AMANECIENDO EN EL ARARAT

Hacemos un alto para poner crampones, guardar un bastón y sacar el piolet. Antes de entrar al glaciar  atravesamos un tramo de hielo vivo donde hemos tenido que extremar precauciones. El sol va tomando altura y se agradece porque la noche ha sido muy fría.


NATI Y MARIANO EN EL GRAN PLATÓ

Llegamos a un gran plató donde la pendiente se modera desde el ya vemos el último tramo de ascensión y la antecima. Ahora vamos muy cómodos la nieve presenta buenas condiciones para la progresión. Ana está en la cima y poco después coronamos  el resto del grupo.


CON ADELA LLEGANDO A LA CIMA

Apenas son las 06,30 horas de la mañana, nos ha costado siete horas  alcanzar la cima situada a 5.165 metros, hemos superado un desnivel de 935 metros la mayoría de ellos con luz frontal y terreno rocoso. En la cima  aunque hace algo de viento se puede soportar bien la temperatura. Abrazos sinceros, fotitos cimeras para la posteridad y… para abajo.


TODO EL GRUPO EN LA CIMA DEL ARARAT

La bajada, acabada la zona de nieve, la hacemos aun más despacio que la subida, no queremos que nos pase como al iraní al que ha socorrido Adela, un tropezón y… buena herida. Toda piedra y alguna  suelta. Llegamos al campamento sobre las 13,00 horas.
EL DESCENSO DE LA PARTE CÓMODA...
...Y EL DE LA INCOMODA

Teníamos un día de reserva por si hacia mal tiempo, así que ahora nos sobra sobre el programa previsto. Hablamos con el guía para ver si nos puede organizar el regreso a Van un día antes y así disponer de tiempo para visitar los antiquísimos templos de los alrededores. Lo tenemos.

Apenas tomar algo caliente, comer un poco y sin descanso bajamos al C1 de tirón. Montamos las tiendas, nos aseamos un poco y preparamos una buena cena con celebración incluida. Chorizo, queso y 6 petacas de whisky de que nos vallamos contentos al saco.
PEQUEÑO ACEMILERO DE BAJADA AL CAMPO I

Habíamos conseguido el Ararat una montaña que de vez en cuando se cobra su tributo en forma de vidas solo tenéis que buscar un poco en internet no es de las más elevadas pero si de las menos inaccesibles debido a sus aislamiento y a la meteo cambiante… que puede empezar con una nubecilla y acabar en fuertes precipitaciones y densa niebla y alcanzar temperaturas de entre menos 15º y menos 20º e incluso más bajas. No es una ascensión que conlleve una gran preparación técnica… pero tampoco es para montañeros inexpertos y lo que si tenemos que llevar en nuestra mochila es una buena forma física.

Día 30 de Julio, desayunamos y recogemos temprano el campamento, salimos hacia el punto final de nuestra expedición. De bajada grupos de niñas venden recuerdos a los montañeros. La bajada nos la ameniza un chavalote al que hemos bautizado como “el George Clooney turco”, ya estuvo con nosotros ayer cenando y celebrando la cima, un tío simpático el hombre.
CON EL CAMPO I RECOGIDO ... NOS VAMOS HACIA ABAJO
NIÑAS VENDIENDO RECUERDOS  DURANTE EL CAMINO DE DESCENSO
NATI CON EL "GEORGE CLOONEY" DE TURQUIA

Descargamos los equipos de las caballerías y esperamos algún tiempo, haciendo fotos y risas, a que llegara la furgoneta. Y derechos a Van. El guía nos ha preparado, siguiendo el itinerario a Van, unas visitas a templos y palacios como el de Isak Pasa, en los alrededores de Dogubeyacit… y además nos ha comprado una sandia tan grande como un balón de básquet, que comemos aparcados en un arcén de la carretera como buenos güirís. Al llegar a Van duchita, paseo y cena.
Día 31 de Julio desayunamos en una calle de Van que está llena de restaurantes y como ya ha acabado el periodo de montaña me atrevo a probar un lácteo muy popular y común en la primera comida del día…error.  Tenemos el vuelo a Estambul  a las 15,00 horas. Llegamos al aeropuerto Atatürk de Estambul sobre las 17,30 horas. Hemos cambiado el hotel que teníamos previsto por uno más cercano al centro, El Golden Horn,  y un poco más vintage… tiene doseles rosas en las camas de algunas habitaciones. La terraza donde sirven el desayuno, tipo buffet, está en el último piso  del hotel con unas fabulosas vistas de Estambul. Tenemos dos días para visitar Estambul. Durante el los días 1 y dos de Agosto visitamos “La Mezquita Azul” , Santa Sofía, El Hipódromo, La Cisterna, El Gran Bazar, El Palacio Topkapi, El Bósforo etc.…probamos la comida turca, sus famosos pastelitos, tomamos un Hamman, baño turco, en Cemberlitas, el más famoso de Estambul, nos dejamos engañar, como todos los turistas y paseamos mucho… pero que mucho. Como veis un viaje de lo más completito.


NATI, TOMÁS, MARIANO, ADELA, RAFAEL Y ANA

En dos mil catorce volví a visitar Estambul, durante un par de días, a la vuelta de la expedición al pico Kazbek de Georgia, y me pareció que no había cambiado nada...